Swain, del tratamiento moral a la psicoterapia
El vocablo psicoterapia en la lengua médico-psicológica se fecha en 1891. Este tratamiento tiene un auge de 20 años notorios hasta decrecer poco después de la Primera Guerra Mundial.
Las tres fuentes:
1) Una corriente médico-psicológica relacionada con la idea de “la influencia del espíritu sobre el cuerpo”. Tuke introdujo la expresión de “psicoterapéutico” en 1872.
Bernheim habla de la sugestión y retoma lo que hace Tuke: “el espíritu humano es una gran palanca y el médico sanador debe utilizarla”. Por este mecanismo, el origen de la psicoterapia se relaciona con la inspiración de un movimiento religioso que consistía en la afirmación “el espíritu al cuerpo de forma completa”, esta convicción se lo consideraba lo más eficaz en la práctica médica. El movimiento tuvo poca influencia en Europa, por lo contrario, en Estados Unidos, jugó un papel determinante.
Según Bernheim, además de que las principales indicaciones de la sugestión se dirigen a la histéria y a la neurastenia, también se dirige a la intervención del elemento psíquico en la génesis y evolución de las diversas enfermedades. Luego aparecería la medicina psicosomática que surge así por este canal en su primera acepción.
2) La reactivación de la herencia psiquiátrica del método del tratamiento moral surgida de una nueva problemática sobre las neurosis bajo dos aspectos: el institucional y el individual.
Mitchell había recomendado en 1875 tratar las enfermedades nerviosas con reposo absoluto y sobrealimentación. Pero de a poco va a insinuarse que el elemento realmente activo en este tipo de tratamiento no es tanto el factor físico que se tenía en la mira: combatir el agotamiento, sino el factor psíquico: asilamiento.
Durante bastante tiempo no se considero la reclusión de los alienados (es el fenómeno de suprimir la personalidad) tuviera virtudes terapéuticas particulares, la internación obedecía más bien a motivos de orden público y de protección social, que justificaban la hospitalización de estos sujetos. El primer poder que ejerce sobre el paciente “nervioso” es la ruptura con el entorno habitual y con las relaciones familiares (se les prohibía tener contacto con lo que estaban acostumbrados). Contaban con el aislamiento, es decir, con el tratamiento moral.
De este modo, se ve un cambio en la perspectiva: El aislamiento moral concierne en primer lugar a las enfermedades nerviosas no calificadas como alienación mental.
En 1870 se crearon una serie de establecimientos especializados bajo la forma de “hospicios hidroterapéuticos”.
El desarrollo de la idea contemporánea de psicoterapia determinó a la neurosis como trastornos de esencia psíquica.
La reactivación completa del tratamiento moral será importante sólo en un segundo momento, a modo de reacción contra el nuevo medio “descubierto” alrededor de 1880: la sugestión hipnótica. Charcot sólo tenía interés en el modo institucional.
Déjerine combina al aislamiento más estricto con el empleo del tratamiento con la palabra, esta innovación es utilizada en el hospital de la Salpetriére.
3) El impulso central y decisivo de fundación de las psicoterapias vino de la reinterpretación hecho por la escuela de Nancy de los fenómenos hipotéticos de la escuela de Salpetriere.
Berheim suponía que caer en la hipótesis era una particularidad de todos los hombres.
Se ordeno el desarrollo tipo del ataque histérico en 4 periodos: epileptoide, grandes movimientos y delirio mental.
Existencia de tres estadios diferenciados en el hipnotismo o fenómenos hipnóticos: el letargo, la catalepsia y el sonambulismo.
Berheim desplazara el interés por una patología extraordinaria a una terapéutica extraordinario.
El estado hipnótico, según Berheim es un estado de subjetividad exaltado. Puede ser producido con o sin sueño.
La sugestión corresponde a una facultad natural del cerebro humano, consiste en la influencia provocada por una idea sugerida y aceptada por el cerebro y despierta una disposición a la que Berheim llamo “ideo-dinamismo”. Toda idea aceptada tiende hacerse acto.
Los poderes de la sugestión:
La sugestión se convirtió en un nuevo poder del hombre sobre el hombre. Debido a esto la sugestión puede ser tanto maléfica (usada para fines personales o criminales), como para una causa benéfica (explotación razonada de esta disposición).
La terapia de sugestión consiste en colocar al paciente en un estado psíquico (donde reconozca y acepte como reales las impresiones que le sean trasmitidas) este estado es el sueño.
La psicoterapéutica hipnótica Explora con el objetivo de cura o de alivio mediante un modo artificial. El sueño artificial no es indispensable, Liébault estableció la sugestión verbal, “la sola idea del sueño dada al sujeto alcanza para producirlo”.
Berheim estableció que el sueño provocado no es necesario para obtener los fenómenos llamados hipnóticos, que todos esos fenómenos pueden ser obtenidos en algunas personas en estado de vigilia, sin maniobras previas, por la sola palabra.
Gracias al éxito que tuvo la versión de la escuela de Nancy de la sugestión se crearon nuevas revistas especializadas.
Desde el puno de vista de la historia social de las terapéuticas psíquicas, hay que considerar el nacimiento de esta moda como el momento fecundo de sensibilización de la opinión y del publico cultivado frente a la existencia de otra medicina, a la que se pudiera pedirle ayuda en casos q se la necesitara.
Psicoterapia se entiende como curación del espíritu pero no solamente del espíritu también como curación del cuerpo por el espíritu.
La idea de una “terapéutica patogénica” aparece en un momento importante en lo que respecta a la fijación del concepto de psicoterapia en el sentido actual. La teoría freudiana sobre el origen de las neurosis sobre su proceso de análisis no es en absoluto exclusiva. Se trataba de una exigencia intelectual que fue también sentida por otros.
Dejerine aporta precisión a la noción de manifestaciones funcionales.
A principios de este siglo la presentación corporal en l queja neurótica representaba una parte considerable y la mayoría de los medico compartía la idea común de un órgano-psiquico Trastornos físicos y trastornos mentales que se comunicaban de manera electiva en los cuadros de neurosis.
La psicoterapia desde hace cierta cantidad de años sufre una marcada evolución. De ser sintomática tiende cada vez más actualmente a volverse patogénica. El médico no se ocupa mas del síntoma, se aboca a las propias causas de los trastornos ante los q se enfrenta.
La psicoterapia es un tratamiento patogénico que en presencia de afecciones de origen psíquico, pretende curarlas por acción psíquica.
Los límites de la hipnosis:
La psicoterapia hipnótica alrededor de 1900 dejo de ser la práctica de moda, centro de reflexión e interés de los especialistas en pacientes nerviosos.
El hipnotismo no tuvo tiempo de transformarse, murió rápidamente y desapareció completamente.
Janet decía que la sugestión seguía siendo un polo de referencia implícito en el campo de la psicoterapia, muchos de los tratamientos psicológicos posteriores a esta época no son mas que metamorfosis de la sugestión.
Lo destacable en el enfoque de Janet es la capacidad de combinar dos utilizaciones del fenómeno hipnótico. Primero vuelve a una función clásica del estado hipnótico, que llamamos función de verdad. Y también utiliza lo que él llama el sonambulismo provocado con fines de exploración del pasado de las histéricas. Para actuar sobre el propio fondo del trastorno, hay que remontarse primero al origen de la fuente del traumatismo y cuando la hipnosis no alcanza, se utilizara cualquier otra forma de estado segundo capaz de desbaratar la pantalla de la conciencia: escritura automática, sueño o inclusive el habla asociada libremente.
Freud escribe que mientras procedamos con método, el tratamiento psíquico moderno, se pone en manos de médicos armas mucho más poderosas para combatir la enfermedad. También hizo un estudio de los procesos de la vida psíquica, cuyas premisas descansan en las observaciones hechas a partir de la hipnosis, nos proveerá de las vías y de los métodos.
La sugestión deja radicalmente fuera de juego el poder reflexivo del paciente, no se trata de una ausencia real de sí mismo, sino de una suspensión de la posesión sobre si mismo.
La sustitución momentánea de la voluntad del paciente por la voluntad del médico, permitiendo una suerte de trasplante psíquico del movimiento. Hay una capacidad de resistencia del paciente a la sugestión.
Freud: incluso en la mejor de las hipnosis, el poder ejercido por la sugestión no es ilimitado, sino solamente de una fuerza determinada. El hipnotizado acepta hacer pequeños sacrificios, rechaza los grandes. Incluso cuando la sugestion funciona los limites de su eficacia se revelan en carácter temporario. Provoca la supresión de fenómenos mórbidos, pero solamente por un breve lapso.
El tratamiento, al repetirse termina por inducir una dependencia del emfermo hacia su hipnotizador, esto es, un desplazamiento de la patología. Las dificultades que se creían superadas resurgen intactas.
Todas las opciones del area de la psicoterapia se determinan con la relación de la sugestion hipnotica.
El retorno al tratamiento moral: la persuasión
Resurgimiento del viejo tratamiento moral en su noción misma y en el espíritu de su dispositivo practico.
La señal de inicio puede localizarse en un artículo (1890), pero alcanza su verdadero desarrollo en 1895, en 1900 ejerce una influencia en el poder político.
Dejerine había sido partidario y practicante de la hipnosis, demás había probado la sugestión en estado de vigilia. Su perspectiva es un enfoque de reacción interna a los impasses y a los problemas de la sugestión hipnótica, proviene de una triple exigencia:
A) una exigencia de profundización; la rápida reaparición de los síntomas luego de su temporaria desaparición bajo el efecto de la hipnosis muestra el carácter superficial de este tipo de tratamiento.
Dejerine decía que la sugestión en estado de vigilia o durante el sueño hipnótico se dirige al síntoma y no a la causa, solo actúa en la superficie y no en el fondo.
Solo llegara a ser eficaz si llegara a explicar al sujeto luego de haberle hecho confesar su vida, como y porque se ah enfermando.
B) se deduce una exigencia de participación del paciente en el nivel de los medios terapéuticos. Esta exigencia es expresada bajo la forma de una protesta ética e incluso política contra la sujeción en la que la hipnosis sumiría a un individuo en relación con otro.
Camus y Pagniez aseguran que el método consistía en trasformar al hipnotizado en una maquina, en un autómata que responde a un impulso y actúa al despertar sin saber lo que hace ni porque lo hace. Wundt hablara directamente de esclavitud. La dependencia en la que el hipnotizado se encuentra con respecto al hipnotizador no es más que una esclavitud por hora y priva al esclavo no solo del derecho a actuar sino también de la posibilidad de actuar según su propia voluntad. De todos los vínculos que relacionan al hombre con el hombre este es el más inmoral y transforma a uno en maquina del otro. Este tipo de argumentación participa del mito sobre el poder total de la sugestión.
Es indispensable que se reconozca a si mismo en el proceso de curación, que el mismo participe en su cura, y que esta se efectué bajo su vigilancia y con su colaboración.
C) se distingue una clara exigencia en relación con el objeto. Una verdadera cura psíquica no puede ser más que la liberación respecto al modo de tratamiento y respecto a la persona del médico.
Una autentica psicoterapia debe proponerse como fin llegar al gobierno total de uno mismo. La participación consiente y voluntaria del paciente en el proceso de cura le permite a este acceder a una posesión ampliada de su propia existencia.
El objetivo de la sugestión debe ser el de resolver al enfermo el dominio de sí mismo.
En oposición a la psicoterapia por sugestión nace una psicoterapia por persuasión
A) por sugestión: Intenta introducir en la conciencia de un sujeto ideas
nuevas o destruir ideas existentes, por fuera de su con
sentimiento y de su juicio.
B) Por persuasión: Pretende que la idea recientemente introducida tenga
el consentimiento del sujeto.
Dubois presenta una perspectiva intelectualista y retoma la inspiración original del tratamiento moral de los primeros alienistas. Insiste en el papel que juega en el enfermo el conocimiento de la naturaleza de sus trastornos, en particular, del origen psíquico de las manifestaciones funcionales.
El tratamiento consistía en conversaciones claras sobre la naturaleza de los fenómenos nerviosos. El punto de partida de la cura es la persuasión del paciente, hay que saber inculcar al enfermo la convicción de que va a curarse. Es necesario que el médico posea el don de la persuasión.
Es necesario que el médico sepa apoderarse de su enfermo. Es necesario que, desde el inicio, se establezca entre ellos un vínculo poderoso de confianza y de simpatía.
Dejerine afirma:
• Que el elemento que interviene en la psicoterapia por persuasión es el elemento efectivo.
• Que los enfermos solo se curan si logran creer en el psicoterapeuta
• La psicoterapia solo puede actuar cuando el enfermo deposita en el psicoterapeuta una confianza absoluta.
• Así como la locura es primitivamente una inmersión de la razón en las pasiones, el estado neurasténico nace en el momento en que la emoción prevalece sobre la razón.
• No es por el razonamiento que se logra que el paciente recupere la razón sino que el individuo se recupera primero y razona después.
• Habla sobre el talento del psicoterapeuta y sobre la confianza absoluta que logra establecer entre el y el paciente que en definitiva es el “amor”.
• La confesión por medio de la persuasión nos devuelve a un individuo absolutamente transparente, que conserva intacta la posesión de si mismo.
El poder total de la hipnosis es reemplazado por un saber total de la vida del paciente. Es necesario que conozcamos del pasiente su vida familiar, su vida conyugal y sobre todo el estado de las funsiones genitales.
Es necesario saber todo para comprender todo.
El objetivo de la psicoterapia debe ser reanudar la continuidad existencial, la reconstitución, la reorientación de la personalidad del enfermo. Esto se da por medio de la movilización de sus capasiades de “emoción estética” , en donde la confesión juega un papel importante. Uno se perdona la falta que se ha confesado.
El dispositivo analítico como síntesis:
Se entiende que la fuerza del psicoanálisis freudiano proviene de su poder explicativo. Aparece como el enfoque sintético por excelencia, como la forma de dar respuesta simultanea al mayor número de exigencia.
Su propia concepción del proceso terapéutico de las neurosis se elabora y desarrolla paralelamente con las enseñanzas de Dubois y Dejerine.
También se sitúa la formación de su idea de cura en relación con el despliegue de las psicoterapias persuasivas.
Freud estudio los problemas de la sugestión hipnótica, pero no se conformo. Lo que supo hacer Freud es encontrar la vía intermedia entre la sugestión y la persuasión. No se alejo de la hipnosis sin rescatar nada, busco penetrar en su principio activo, aislarlo y conservarlo en la cura.
genioooooo!!!
ResponderEliminar